Te invito a pensar en un momento en el siguiente experimento:
Sientas a un niño de 2 años con un conejo a un lado y una manzana en el otro lado. ¿Qué crees que pasará?
¿Se comerá al conejo? Muy seguramente que no. Jugará con el conejo y se comerá la manzana.
Este experimento hipotético (en el que creo que estamos de acuerdo en el resultado más probable) muestra que nuestro instinto no es comernos a otros animales. Lo hacemos, sí (yo lo hice por más de 30 años, y en cantidades!) pero no es nuestro instinto. Nos hemos criado de esta manera. Nuestros padres y cuidadores nos dieron a comer animales desde chicos, seguramente con mucho amor y queriendo lo mejor para nosotros (y porque probablemente a ellos también los criaron de la misma manera), pero no fue algo que instintivamente hayamos desarrollado.
Hoy en día la ciencia muestra que una alimentación 100% vegana (sin incluir ningún producto de origen animal ni derivado de un animal) es totalmente posible y además que nos va a ayudar a nuestra salud (como hablamos en una lección anterior).
Sé que este puede no ser un tema fácil para muchos de hablar ni de escuchar. A nadie le gusta que le digan que lo que está haciendo está mal o que causa daño a otros. Lo que sucede es que la mayoría de personas «nos hemos desconectado» de la realidad que sucede detrás de nuestro plato de comida.
Por un momento, y con mente abierta, te invito a pensar lo que sucede detrás de un pedazo de carne, o esos «nuggets de pollo» que tanto te gustan. Para que ese pedazo de carne llegue a tu plato fue necesario que un animal fuera criado y luego matado para tu consumo.
Todo animal tiene sistema nervioso y por tanto siente. Sienten dolor, además sienten miedo e igualmente felicidad! ¿Sabías que los cerdos o chanchos pueden ser más inteligentes que un perro? Un cerdo reconoce su nombre y reconoce tu cara (como un perro). Pero al perro lo cuidamos y al cerdo nos lo comemos. ¿Por qué? (te invito a hacer esta reflexión).
Te comparto que yo, siendo ya vegetariano y con 42 años, pensaba que la vaca no sufría por sacarle la leche para hacer el queso que tanto me gusta (sí, en «momento presente», siendo vegano, me gusta el queso! No soy vegano por «sabor»). Hace casi 2 años que estaba leyendo sobre cómo se hacía el queso y el proceso con los vacas. Me enteré que las «vacas son como las mamás, dan leche porque han estado embarazadas». Y es que el proceso básicamente es: las embarazan, su embarazo dura 9 meses, nace el ternero, se lo quitan al día siguiente (para que no se tome la leche que va destinada a hacer mi queso), el ternero si es macho usualmente va al matadero (si es hembra muy probablemente vive el mismo proceso de su mamá), y luego a la vaca la vuelven a embarazar y se repite la historia. Esto sucede 5 o 6 veces hasta que a la vaca la matan pues ya no da para más.
Entendí esto y dije «no más», soy vegano. Sabía que era físicamente viable (la ciencia lo muestra) y que además tenía opciones para reemplazar la leche y el queso (leches vegetales: de soya, almendras, quinua,… y quesos veganos).
Adicionalmente me enteré que el queso (y claro, la leche) tienen caseína, lo cual genera adicción en tí (hay un efecto de «placer» que se genera en tu cuerpo al consumirla) y por eso me decía yo que era «adicto al queso». Es literal la adicción.
¿Sabías que las vacas pueden tener mejores amigas entre ellas? También consuelan a otros vacas cuando se sienten tristes (lloran cuando les quitan a sus hijos, a veces por días; tal cual le podría suceder a una mamá humana si le quitan a su hijo al siguiente día de nacido).
Si quieres conocer un poco más sobre la industria de la leche te invito a ver este video corto (puede ser un poco fuerte en sus imágenes, pero te invito a verlo, para tomar consciencia sobre la realidad, tu luego puedes decidir qué hacer):
Los lácteos dan miedo (6 minutos): Ver video haciendo clic aquí
Paul McCartney (el ex-Beatle) tiene una teoría y es que si «los mataderos tuvieran paredes de cristal, habría más veganos en el mundo». Si más personas fuéramos conscientes de lo que sucede en la crianza de animales, seguramente no buscarías con tantas ganas ese pedazo de carne.
Si quieres ver el video de Sir Paul McCartney (13 minutos): haz clic aquí
Si miras a un animal a los ojos (perro, gato, vaca, cerdo,…) vas a darte cuenta que tienen emociones. Sucede que la industria de cría de animales busca ser lo más productiva posible (como cualquier industria) y es con esta intención que muchas veces se dejan de lado los sentimientos hacia los animales. Así a una vaca la críen al aire libre, al final se termina matando.
Te invito a ver videos para informarte mas al respecto (Nota: pueden contener imágenes fuertes a la vista, pero te invito a conocer lo que sucede muchas veces detrás de lo que te estás comiendo).
Ver el video «El discurso más importante que jamás escucharás – Gary Yourofsky«.
Te invito a investigar, buscar, tomar consciencia, preguntar,… Que sepas que hay otras opciones!
Por un día que lleves una alimentación vegana vas a estar salvando la vida de un animal. Así que te invito a empezar el camino!
¡Cuenta conmigo!